lunes, 25 de noviembre de 2019

Jiraiya - Orochimaru



Regresó hasta el improvisado campamento en una pequeña cueva que había acondicionado junto a Jiraiya, la situación actual para ambos no pintaba bien pero no podían continuar en activo por más tiempo después de que la misión se hubiera complicado en medio de la guerra.

― Terminé de poner trampas, si alguien se aproxima hasta aquí, lo sabremos. ― Informó mirando a su compañero que estaba sentado sobre una roca acabando de vendar su muñeca izquierda.

― ¿Qué pasa si se trata de Tsunade?, no se encontraba mejor que nosotros cuando se separó. ― Cuestionó con preocupación Jiraiya mirando intensamente al otro shinobi.

Resultado de imagen de jiraoro― Es un riesgo que debemos tomar, el enemigo sabe que estamos aquí, ahora mismo es prioridad nuestra supervivencia. ― Indicó poniendo una de sus manos a la cintura, molesto por la obsesión que tenía el otro hombre con la kunoichi rubia.

― ¿¡Cómo puedes ser tan cruel, Orochimaru!? No te perdonaré si es Tsunade la que cae en unas de tus trampas. ― Aseguró mirando a su compañero.

― No importa lo que creas, ahora mismo necesitamos descansar para reponer nuestro chakra y curar las heridas. ― Escupió con sorna Orochimaru, molesto por el hecho de que Jiraiya solo viera por la mujer de grandes senos, ignorando su propia seguridad y exponiendo a todos.

― ¡Maldito!, tienes razón pero quizás ella esté buscándonos ahora mismo. ― Habló intentando convencer a Orochimaru de retirar las trampas.

― El único capaz de no descansar estando herido y casi sin chakra eres tú, Tsunade es lo suficientemente inteligente para saber que debe buscar un lugar seguro en estos momentos para reponerse al ataque que hizo separarnos. ― Afirmó el hombre de ojos dorados.

― ¡PERO AÚN SEA MUY FUERTE Y TODO, PODRÍA ESTAR EN PELIGRO, OROCHIMARU! ― Gritó con preocupación por su amiga y compañera de equipo.

― ¡Sí que eres un idiota, Jiraiya! ― Se lamentó con molestia Orochimaru mirando con el ceño fruncido al otro shinobi. ― Si tanto te preocupa, sal y vete a buscarla. ― Sugirió señalando la salida del refugio donde estaban. ― Espero pises una de las trampas y mueras por idiota… ― Escupió antes de darse la vuelta y caminar a sentarse lo más lejos posible de su compañero.

Orochimaru estaba molesto y celoso por el estúpido enamoramiento de su compañero hacia la rubia kunoichi porque no parecía darse cuenta que ella nunca iba a poder corresponder a su amor, especialmente cuando Tsunade ya estaba en una relación amorosa con otro shinobi.

Jiraiya chasqueó la lengua en respuesta, mostrando su irritación a lo poco considerado que era Orochimaru hacia su compañera de equipo y preguntándose de cómo podía ser tan frío e indiferente hacia la vida de su amiga.

― Está bien, iré a buscarla. Yo no dejo a un compañero atrás. ― Afirmó Jiraiya caminando a un lado de Orochimaru y haciendo caso omiso a su propio cansancio.

― Notificaré tu muerte a Sarutobi  sensei y haré hincapié en que deseabas ser un kamikaze idiota por no querer usar tu dura cabeza. ― Habló con dureza Orochimaru intentando no mostrar su enojo.

― Eres desagradable a veces, Orochimaru. ― Susurró el shinobi de cabello blanco mientras detenía sus pasos al escuchar las crueles palabras de su compañero. ― No comprendo cómo puedes ser tan frío, aun cuando se trata de tus amigos y camaradas. ― Añadió apretando sus manos hechas puños.

― Y yo no entiendo cómo puedes arriesgarte sin más, olvidando todas las reglas básicas de los shinobis e impulsarte sin tener un plan concretado, estando en deplorables condiciones y en medio de territorio enemigo. No puedes juzgarme si tomo en cuenta la opción más práctica mientras tú sigues omitiendo el peligro que tú olvidas al pretender actuar impulsivamente y pensar que Tsunade es tan ingenua como para arriesgarse en territorio enemigo a mitad de la noche. ― Argumentó sin querer mirar al otro hombre.

― Sé que ella es inteligente y una buena shinobi. ― Murmuró Jiraiya como si se disculpara para volver a caminar y tomar asiento donde se encontraba antes. ― No puedo evitar preocuparme por ella. Simplemente, no me agrada esta situación. ― Se excusó llevando su mano derecha a la cabeza.

― Si lo sabes, preocúpate más por reponer tus energías. Mañana nos espera un día duro mientras buscamos a Tsunade. ― Indicó más tranquilo al percatarse de que había razonado el hombre de pelo blanco mientras apoyaba una de sus manos en uno de los hombros de Jiraiya.

Jiraiya miró a Orochimaru y sonrió, sabiendo que tenía razón pero al mismo tiempo inquietándose, sabiendo que no estaría Tsunade para detener sus instintos más precarios que había estado ocultando durante todo ese tiempo.

Orochimaru se sorprendió cuando su mano, la que había puesto sobre uno de los hombros de su compañero de equipo para darle ánimos, fue retenida por Jiraiya, quien sin mirarlo al rostro, tiró con fuerza de él para atraerlo a su regazo.

― Tú tampoco estás en las mejores condiciones. ― Indicó Jiraiya mientras rodeaba la cintura del otro shinobi.

― ¿¡QUÉ HACES!? ― Cuestionó sorprendido el hombre de cabello negro por el inesperado cambio en su compañero, esperando que con sus palabras lo liberara.

― Si no supiese que fueras hombre, podría confundirte con facilidad. Incluso, tu cintura es más estrecha que la de la princesa Tsunade. ― Agregó el ninja de cabello blanco haciendo sonrojar al otro hombre por el descarado y humillante comentario.

― ¡IDIOTA! ― Gritó Orochimaru mientras empujaba a Jiraiya para intentar salir del agarre que lo mantenía, cuando escuchó la risa de su compañero mientras su corazón latía veloz y el deseo primario de huir le hacía sentirse más débil de lo que se encontraba.

― Lo siento, lo siento. ― Se disculpó Jiraiya sonriendo mientras el ninja de ojos dorados se apartaba y alejaba con el rostro rojo. ― Solo bromeaba. ― Agregó.

― De verdad eres un idiota. ― Repitió sintiendo sus mejillas arden y un pequeño dolor al escuchar las palabras del shinobi de cabello blanco que solo estaba bromeando, se alejó un poco de su compañero. ― Si hubiese sido una mujer, nunca me habría fijado en ti. ― Añadió de manera mordaz sabiendo que eso era una gran mentira.

Jiraiya miró a su compañero con una sonrisa divertida para inclinarse fingiendo el que hubiesen disparado una flecha en el pecho y estuviese en un insufrible dolor.

― Eres demasiado cruel, Orochimaru, ¿por qué no te fijarías en mí? Soy guapo, todo un caballero. Cualquier dama estaría encantada de tenerme a su lado. ― Se elogió con todo coqueto y se acercó a su amigo mientras le dedicaba una gran sonrisa.

― Porque eres un idiota y un pervertido que le gusta espiar en los baños públicos. ― Bufó molesto. ― Deja de acercarte, Jiraiya. ― Pidió un poco nervioso al saber que su amigo iba hacer algo que no sería de su agrado ya que podía intuirlo por el rostro desagradable que mostraba.

― Pero… así te gusto… ― Canturreó con una sonrisa divertida, notando lo nervioso que se ponía el contrario, acercándose un poco más a su compañero para volver a tomarlo de la cintura.

― ¿¡QUÉ DICES!? ¡Suéltame, Jiraiya! ― Exigió fingiendo no saber de qué hablaba el otro hombre mientras peleaba con los brazos del contrario para liberarse. ― Tú no me gustas y dudo que le gustes a alguien. Estás loco o quizás te diste algún golpe en la cabeza cuando nos emboscaron. ― Habló con sarcasmo mientras reía sin querer ver el rostro contrario.

― Entonces… mírame a los ojos y di que no te gusto ni un poco, Orochimaru. ― Susurró cerca de una de las orejas de Orochimaru, logrando que se estremeciera entre sus brazos, haciendo que una sonrisa se volviera a formar.

― No me gustas, Jiraiya. ― Afirmó mientras se volteaba para mirarlos a los ojos mientras decía lo que el otro ninja le pidió.

― Mentiroso. ― Acusó en voz baja antes de inclinarse para juntar sus frentes y sin borrar su sonrisa.

Orochimaru estaba seguro de que debía tener el rostro demasiado rojo y aunque apretaba los desarrollados bíceps de Jiraiya, en un intento de que este comprendiera que toda esa situación no estaba bien, siendo que lo mejor era que lo liberase.

― No es divertido y deja de imaginar lo que no es. ― Repitió Orochimaru en un vano intento de convencer al hombre más musculoso para poder alejarse lo suficiente y no ser retenido pero Orochimaru no contó que solo ocasionó todo lo contrario y el agarre de Jiraiya se apretó más, haciendo que su cuerpo se congelara al estrecharse más al contrario, pudiendo sentir como la entrepierna del otro hombre picaba su vientre, haciéndolo estremecer.

― Deja de mentirte a ti mismo, Orochimaru. ― Murmuró Jiraiya demasiado cerca de los labios de su compañero que se apretaron al sentir su aliento cálido golpearlo.

― Jiraiy… ― Orochimaru no tuvo tiempo de replicar cuando el otro shinobi se precipitó sobre su boca, si en un principio solo intentaba separarse, la lengua ávida del ninja de los sapos se introdujo en su boca y su intento de hacerla salir a la lengua intrusa solo estaba teniendo en ambos el efecto contrario, excitándolos. Convirtiéndose el tosco, violento y sorpresivo beso en uno demasiado lujurioso.

Sin embargo, el beso terminó de la misma forma en la que se formó para ser seguido de otro aún más ansioso y Orochimaru apretó más los músculos del brazo contrario mientras las manos de Jiraiya no dejaban de moverse, presionando su anatomía y retirando algunas de las prendas.

― ¡Es… espeeeer… espera! ― Exclamó el ninja que invoca serpientes al sentir como las ágiles manos de Jiraiya se habían movido de manera increíblemente veloz para colarse bajo su ropa.

― No… ― Jadeó en respuesta a Orochimaru cerca de la oreja derecha del moreno. ― Tú también lo deseas… deja de reprimirte, Orochimaru. ― Dijo antes de volver a capturar los labios contrarios haciendo que su compañero cediera.




La mañana llegó con el cantar de los pájaros y dos hombres desnudos dormían abrazados sin importar lo que ocurría a su alrededor o en donde se encontraban.

― Creo… que debería regresar más tarde. ― Habló la kunoichi rubia demasiado sonrojada por la escena protagonizada por los shinobis dormidos ya que ella había llegado hasta el lugar buscando a sus compañeros de equipo. ― Me preocupé por nada. ― Musitó Tsunade con molestia mientras se retiraba del lugar.




-Fin-




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Naruto - Sasuke

    Había necesitado de este enfrentamiento para poder sentirse satisfecho, al igual que mostrar sus emociones y sentimientos en cada golp...