Sasuke
llegó a la entrada de la enorme gruta donde sentía estaba Orochimaru pero el
dolor en donde estaba el sello que se le había puesto no había dejado de
intensificarse cada vez que se acercaba más y más hasta donde estaba su
creador.
El
Uchiha se detuvo para mirar el camino recorrido, había dejado en aquel valle a
Naruto y no pudo evitar apretar los labios y los puños mientras se repetía que
el rubio estaría bien y no debía de preocuparse, tenía que centrarse en
conseguir el poder necesario para derrotar al asesino de su clan.
―
¡Bienvenido, Sasuke kun! ― Saludó una voz ya conocida para Sasuke y que
reconoció a quien lo saludaba como Kabuto, el chico que había estado haciendo
el examen de ascenso a chunnin.
Sasuke
no pudo evitar el fruncir el ceño ante la aparición de Kabuto, sabía se trataba
de un espía de Orochimaru porque Kakashi se lo había dicho pero no entendía
porque había sido Yakushi y no el propio Sannin de las serpientes quien lo
recibiera.
―
Orochimaru sama te ha estado esperando, ha deseado mucho tiempo tu llegada y no
estaría bien alargar el momento. ― Continuó hablando el ninja de gafas. ―
Orochimaru sama está muy complacido de que por fin hayas venido y podrá
reunirse contigo. Por favor, no nos demoremos más y sígueme, te llevaré hasta
donde espera Orochimaru sama. ― Pidió Kabuto.
Sasuke
no se molestó en responder y tan solo caminó detrás del chico mayor al interior
de la gruta que no era más que una fachada a las instalaciones de una guarida
donde del Sannin de las serpientes se ocultaba de sus perseguidores.
Cuando
Kabuto llegó a la entrada de una gran sala, se detuvo e hizo una señal al chico
para que se adentrara al lugar, lo cual hizo el Uchiha para encontrarse con una
habitación iluminada por antorchas y una especie de trono, donde se encontraba
alguien sentado.
―
¡Bienvenido, Sasuke kun! Me alegra que hayas aceptado mi invitación porque te
he estado esperando. ― Siseó con una enorme sonrisa Orochimaru.
Sasuke
observó en silencio al hombre y toda la sala en la que se encontraba por si
todo eso se tratase de una trampa ya que no le inspiraba mucha confianza. Sin
embargo, sabía que debía hacerlo y arriesgarse porque necesitaba ser más fuerte
para poder cumplir su meta.
― Así
que tú el famoso Orochimaru del que tanto me han contado, aquella vez… no
tenías ese aspecto. ― Se animó a hablar Sasuke sin dejar de mirar al hombre
frente a él, apreciando su aspecto similar al de una serpiente. ― ¿Cuándo
comenzarás a entrenarme? ― Preguntó sin rodeos para escuchar como el Sannin
sonrió aún más.
― No
comas ansias, Sasuke kun. ― Respondió mirando al chico Uchiha, quien frunció
más el ceño. ― Comenzaré a entrenarte cuando nos vayamos de este lugar, ahora
mismo es peligroso permanecer en este lugar.
― No
vine hasta aquí para desperdiciar el tiempo como hacía en Konoha, él sigue por
ahí. ― Protestó Sasuke apretando los puños molesto por las palabras del extraño
hombre de ojos dorados.
― No
te precipites, Sasuke kun. Me gusta tu energía pero es importante descansar,
especialmente cuando has liberado el sello. ―Se rió Orochimaru. ― Tengo grandes
expectativas puestas sobre ti y sé que las cumplirás.
― ¿Cuándo
se supone comenzaré con mi entrenamiento? ― Cuestionó el adolescente de mala
gana.
―
Pronto, Sasuke kun. Ahora, espero seas consciente que te has convertido en un
enemigo de Konoha, has abandonado la villa en la que naciste para venir conmigo
de forma negligente. ― Indicó Orochimaru necesitando saber que el chico era plenamente
consciente de sus acciones y que él tampoco lo iba a dejar marchar de su lado,
había esperado durante mucho tiempo para tener a un prodigioso Uchiha cerca.
― Se
muy bien que ahora soy un desertor a Konoha y por tanto, un enemigo. ― Contestó
de mal humor mientras fulminaba con la mirada al hombre mayor por decirle algo
que era tan obvio.
― Es
bueno saber que lo sabes, Sasuke kun. ― Orochimaru soltó una pequeña risa
divertida por el comportamiento del adolescente. ― Era necesario que tú mismo
confirmaras tu decisión pero te advierto que no te atrevas a traicionarme porque dudaré en
matarte. ― Advirtió el hombre de aspecto serpentino. ― Ahora tienes que
descansar como ya te había dicho, Kabuto te acompañará a una habitación para
ello. ― Dijo Orochimaru.
Kabuto
apareció haciendo una reverencia y Sasuke se acercó a él, todo lo ocurrido no
era lo que el Uchiha esperaba y por tanto, no sentía más que inconformidad por
toda esa “bienvenida”.
―
Parece que le has agradado a Orochimaru sama, supongo debe de darte la
bienvenida oficialmente, no te arrepentirás de tu elección Sasuke kun. ― Habló
Kabuto cuando se había alejado un poco de la sala en la que se encontraba
Orochimaru.
Sasuke
ignoró al chico mayor, todo aquello le parecía una pérdida de tiempo y por
tanto, poco le importaba hablar. Tan solo quería ya comenzar con su
entrenamiento ya que no era lo suficientemente fuerte para derrotar a Itachi si
aún era débil. Incluso Naruto había logrado superarse y desarrollarse como
ninja cuando pudo apreciar en esa última batalla como el rubio se había
igualado en fuerzas a él y no podía permitir sucediese algo así.
― Esta
será tu habitación, de momento. Orochimaru sama la preparó expresamente para
ti, espero sea de tu agrado, Sasuke kun. ― Indicó Kabuto cuando llegaron a una
de las tantas habitaciones que habían en aquel lugar pero el Uchiha no se
molestó en responder al chico de cabello gris, solo ingresó a la habitación en
silencio. ― Al parecer es cierto los rumores que contaban de lo orgullosos que
son los miembros pertenecientes al clan Uchiha. ― Rió Kabuto colocándose sus
lentes. ― Será interesante el que estés aquí, Sasuke kun. Muy interesante. ―
Murmuró el joven de cabello gris relamiendo sus labios siniestramente antes de
alejarse de la puerta que accedía a la habitación en la que estaba Sasuke.
Fin.